El Arsenal sufrió una dura derrota 0-1 contra el West Ham, lo que complica gravemente sus opciones de luchar por el liderato de la Premier League contra el Liverpool, que podría ampliar su ventaja a 14 puntos si vence al Manchester City este domingo.
Mikel Arteta y las bajas clave
Tras recortar cuatro puntos al Liverpool en las últimas tres jornadas, el Arsenal tuvo la oportunidad de presionar a su rival por el título con una victoria. Sin embargo, las bajas de jugadores clave como Kai Havertz, Gabriel Martinelli y Bukayo Saka, debido a lesiones, dejaron al equipo mermado en ataque. Arteta no pudo contar con su tridente ofensivo, lo que afectó gravemente la capacidad creativa del equipo.
Primer tiempo sin profundidad
A pesar de tener el control del balón, el Arsenal careció de profundidad y verticalidad en su juego. No logró generar ninguna ocasión clara frente a la portería defendida por Alphonse Areola, y su posesión se mostró inofensiva. El West Ham, bien ordenado defensivamente, esperó su oportunidad.
El gol de Jarrod Bowen
El West Ham sorprendió al Arsenal con un gol al borde del descanso. Jarrod Bowen robó el balón a Martin Ødegaard, y tras una gran jugada colectiva, cabeceó a la red para poner a los suyos en ventaja. Este gol significó el séptimo tanto de Bowen en la temporada, consolidándose como el máximo goleador del equipo.
Cambios en el Arsenal
Arteta intentó revertir la situación realizando cambios en la segunda mitad, con la entrada de Oleksandr Zinchenko y Myles Lewis-Skelly para buscar mayor verticalidad. Sin embargo, un golpe más llegó cuando Lewis-Skelly fue expulsado por una falta sobre Mohammed Kudus cuando el jugador del West Ham se encontraba solo ante el portero.
Despedida a la lucha por el título
Con un hombre menos y sin capacidad para generar peligro, el Arsenal no pudo evitar la derrota. Si el Liverpool vence al Manchester City, su ventaja podría aumentar a 14 puntos, dejando al equipo de Arteta casi sin opciones de alcanzar el liderato.
Infomación de EFE/Foto: EFE