El seleccionador de Palestina, Ehab Abu Jazar, afirmó que el partido amistoso que disputarán mañana sábado en San Mamés ante la selección de Euskadi será “un mensaje para el mundo entero”, representando a un pueblo que “vive bajo ocupación” y “lucha por su libertad”. El encuentro, de carácter solidario, aspira a reunir a unas 50.000 personas, y la recaudación será gestionada por Médicos Sin Fronteras para destinarla a ayuda médica y humanitaria en la franja de Gaza.
En la rueda de prensa previa, Abu Jazar destacó la importancia de su presencia en Euskadi y la responsabilidad que sienten los deportistas palestinos para visibilizar la situación de su pueblo. Recordó que el “genocidio no ha parado” y que un millón de personas siguen sin hogar, además de revelar que su propia casa fue bombardeada recientemente.
El defensa Yaser Hamed, vizcaíno e internacional palestino, agradeció el “recibimiento y apoyo constante” recibido en Bilbao y expresó la ilusión del equipo por disputar este encuentro, el primero de Palestina en Europa. Aunque reconoció que será un duelo difícil, confió en vivir un día “histórico e inolvidable” y deseó que el partido tenga un impacto global que contribuya a que “todo termine pronto”.
Hamed también compartió que ha perdido a varios familiares en los ataques sobre Gaza, lo que añade una dimensión emocional al partido para él y sus compañeros. Asimismo, valoró el esfuerzo de los jugadores de la selección vasca para acudir a la convocatoria.
Por parte de Euskadi, el asistente Mikel Labaka admitió que, tras escuchar a Abu Jazar y Hamed, hablar únicamente de fútbol “se hace difícil”. Aun así, expresó su deseo de que el fútbol pueda ayudar de alguna manera y agradeció la disposición de los jugadores vascos, pese al calendario “saturadísimo”, en un momento en el que la Federación Vasca busca seguir avanzando hacia el reconocimiento oficial de su selección.
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