El Liverpool volvió a tropezar en la Premier League al empatar 1-1 ante el Sunderland, un resultado que agrava la crisis del equipo y pone en duda la continuidad de Arne Slot, que solo suma cuatro victorias en sus últimos catorce partidos. La victoria del fin de semana ante el West Ham resultó ser un espejismo y los ‘Reds’ ofrecieron otra actuación pobre en Anfield.
El equipo dejó sensaciones preocupantes: poca creatividad ofensiva y facilidades defensivas. Slot volvió a dejar a Salah en el banquillo y apostó por Gakpo, Wirtz e Isak, pero las llegadas más claras fueron aisladas: un disparo lejano de Szoboszlai, un cabezazo al palo de Mac Allister y un mano a mano fallado por Wirtz. Esa falta de contundencia permitió al Sunderland mantenerse con vida.
El gol visitante llegó gracias a un disparo de Talbi desde la frontal que desvió Van Dijk, imposible para Alisson. El Liverpool solo logró empatar por un gol en propia puerta de Mukiele tras un intento de Wirtz, que todavía no logra estrenarse como goleador pese a haber disputado 18 partidos desde su fichaje millonario. Incluso en los minutos finales, el Sunderland estuvo cerca de llevarse los tres puntos al contragolpe.
Con este nuevo tropiezo, el Liverpool cae al octavo lugar con 22 puntos, quedando a 2 de puestos de Champions y a 11 del liderato. El Sunderland, mucho más sólido de lo esperado, se mantiene sexto con 23 unidades, mientras en Anfield crece el descontento hacia un equipo que no encuentra rumbo ni regularidad.
Con información base de EFE/Foto: EFE