Ramos triste porque su gol en Sevilla no sirvió de nada

 Sergio Ramos, autor el miércoles del 1-0 con el que el Sevilla se adelantó al PSV Eindhoven en el partido de la Liga de Campeones que finalmente se llevó el conjunto neerlandés por 2-3, lo que dejó a la formación española sin opciones a pasar a los octavos de este torneo, lamentó este jueves que ha estado "18 años esperando este gol y no ha podido tener un sabor más amargo".

El central camero regresó esta temporada al club en el que se formó, con el que debutó en la élite y que dejó hace dieciocho años para fichar por el Real Madrid, pero su primer gol en su segunda etapa como sevillista no ha llegado en la circunstancia que hubiera deseado.

"Una noche durísima en la que vimos lo mejor y lo peor, pero los detalles deciden en la máxima competición. Entendemos y compartimos vuestra frustración. Solo nos queda callar, levantarnos y seguir trabajando para seguir en Europa", añade el defensa de 37 años en un mensaje difundido por sus redes sociales y dirigido a la afición sevillista.

Ramos ya habló el miércoles tras el partido y dijo que, tras un 2-0 favorable, llegó la expulsión del argentino Lucas Ocampos y que quedarse "con uno menos mató" al equipo, además de añadir que "es difícil hablar en este momento, la mejor manera es obteniendo resultados y no se están teniendo".

El sevillano tampoco pudo celebrar como merece que el 1-0 que anotó era el gol número 10.000 de la Liga de Campeones de la UEFA y que, además, lo convertía en el defensa más goleador de la máxima competición europea de clubes.

Información de EFE/Foto: EFE